VULNERABILIDAD EDUCATIVA, POLÍTICA E INSTITUCIONAL EN COMUNIDADES AFECTADAS POR LAS INUNDACIONES DE LLANURAS: ASPECTOS FUNDAMENTALES PARA LA GESTIÓN Y LA GOBERNABILIDAD

THE NUTRITIOUS TRADE IN ARGENTINEAN 2001-2006: TERRITORIAL ANALYSIS OF THE SECTOR OF SUPERMARKETS

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La vulnerabilidad política – institucional

 

No solo el ámbito educativo es vulnerable en esta pequeña comunidad ribereña del AMGR, también lo es, y sin ninguna duda el aspecto político e institucional. Si consideramos lo expuesto por Wilches – Chaux (1989) y retomado por Allan Lavell (1996) acerca de las definiciones de ambos enfoques de la vulnerabilidad podemos comenzar diciendo que en esta comuna los dos aspectos indistintamente se manifiestan actualmente en la localidad. Con mirada restrospectiva esta comunidad se halla inmersa en una importante crisis institucional sin precedentes, que viene aconteciendo desde hace unos pocos años atrás en el marco de su máximo organismo gubernamental, el municipio, problemas políticos partidistas en primer lugar, manejos inapropiados de los fondos públicos, disputas de poder de orden partidarias e incapacidad en el manejo institucional, administrativo, político y de gestión por parte de los gobernantes de turno, llevaron a que esta situación se extendiera en el tiempo y llegara a su punto álgido en el año 2006 cuando el por entonces intendente municipal fuera destituido de su puesto y denunciado por el propio consejo municipal por malversación de fondos públicos, desatándose así una gran inestabilidad institucional, que provoco que quiénes están a cargo de la administración municipal centraran sus energías en esta compleja y tensa situación desatendiendo cualquier otro aspecto fuera del espectro problemático que los ocupaba en esos momentos.

"En las ciudades metropolitanas latinoamericanas, las municipalidades que las integran tienen una carga cada vez mayor". (Pírez, 1993) Tienen características comunes estos municipios: baja capacidad para enfrentar los problemas urbanos y particularmente, para hacerse cargo de las necesidades de la población de menores recursos. Estas cuentan con limitados recursos financieros, porque reciben una baja participación de los ingresos que recaudan los otros niveles estatales, como así también porque sus sistemas fiscales son limitados y sus aparatos recaudadores ineficaces." El aparato administrativo tampoco está a la altura de las necesidades, el personal tiende a ser excesivo, no presenta la calificación requerida para las tareas de una administración moderna. En consecuencia, no están en condiciones de conocer con cierta precisión las necesidades que deban enfrentar ni mucho menos de programar su atención" (Pírez, 1993)

 

Respecto de su funcionamiento interno, podríamos decir que responde a un modelo de gestión común a otros municipios del AM como así también de la provincia, que presenta en su organización, como ya hiciéramos mención, severas deficiencias de orden administrativo, operativo, y de toma de decisiones, debido fundamentalmente a las disputas internas del poder político local. También han debido enfrentar la transferencia de competencias y funciones desde los niveles centrales de gobierno, de la nación y de la provincia, en respuesta al nuevo paradigma de la descentralización iniciada en nuestro país en la década del 90. Frente a esta situación han tenido que enfrentar la viabilidad y sustentabilidad de la descentralización. Paralelamente a este proceso de descentralización, principalmente de las políticas sociales, hacia los gobiernos locales, la capacidad de gestión de los municipios ha estado históricamente limitada, llegándose a situaciones críticas de diferentes índoles.

La vulnerabilidad en este caso, no solamente se hizo presente en esta instancia de poder, también se encuentra omnipresente en el ámbito político; que si bien ha existido desde el retorno a la democracia y ha denotado en ciertas ocasiones numerosas contradicciones de sus dirigentes político (a principio del corriente año el actual intendente electo por voto popular pertenecía a una rama partidaria, hasta ese momento ganadora según las encuestas, poco tiempo antes de las elecciones de octubre, hizo la presentación oficial de su lista como una alianza del partido que días después sería el electo), quiénes, como hemos visto en el ejemplo, están más preocupados en reposicionarse dentro de la cartera política del momento, haciendo componendas y/o alianzas que le sean favorables a sus propios intereses y no a los de la sociedad a que representan y de la cual también son parte integrantes. Estas irregularidades manifiestas y conductas de más conocidas por los lugareños y a nivel metropolitano también, incentivan desde el puesto de poder que ocupan, al asistencialismo y clientelismo político muy útiles en épocas electorales pero sobre todo en momentos de emergencia hídrica, trasformándose así en instrumentos que por momentos hasta llegan a ser legitimados por la propia población, quiénes han desarrollado un comportamiento y un acostumbramiento que fomentan estos manejos políticos sin ni siquiera cuestionarlos.

“Que la crisis es una oportunidad es una frase repetida. Tiene un lado de verdad, la extrema necesidad de la mayoría de la ciudadanía convocada y el comportamiento oportunista de los dirigentes pueden resignificar las nuevas políticas propuestas, dando lugar a otra ronda de asistencialismo con otro nombre: de clientelismo inmediatista, a un acentuamiento del lado mafioso del sistema político, del lado oportunista de organizaciones confesionales o no gubernamentales, profundizando la pérdida de cultura de derechos y acentuando la de los favores, incluso con la complicidad pasiva de la población que apenas legitima más de lo mismo” (Coraggio, 2003)

Debemos destacar que Puerto Vilelas no es la excepción a la regla, hechos como estos suceden cotidianamente en muchos municipios del país y la provincia, pero dada la escala de nuestra unidad de análisis queda más en evidencia a la luz de los hechos de público conocimiento; que hoy por hoy transita por una concepción política y de gobernabilidad ineficiente, deficitaria, de bajos recursos y una crisis de identidad difícil de manejar y asumir.

Al igual que lo expresáramos para el caso de la vulnerabilidad educativa y el trabajo muchas veces en silencio y constante de los docentes para formar ciudadanos responsables y concientes de su realidad, se traduce también en el trabajo realizado por referentes locales quiénes a conciencia, desde el rol que les toca desarrollar dentro de la comunidad y un tipo de política responsable y en conjunto con el resto de la población continúan luchando día a día para llevar a cabo gestiones que se orienten a sacar a esta ciudad del AMGR del estanco económico, social, cultural y principalmente institucional el que viene sufriendo ya desde hace tiempo.

Predomina también un estilo político de gestión, que en vez de orientarse hacia la resolución de problemas y satisfacción de necesidades, se moviliza hacia la acumulación partidaria o intrapartidaria de posiciones de poder. Ello significa que la política local se orienta en el corto plazo hacia la atención de situaciones que contribuyen a incrementar las posiciones (actuales o potenciales) de poder de los actores dentro del aparato. De esa manera los recursos se utilizan de forma inmediatista, sin tener en cuenta los requerimientos de mediano y largo plazo, se promueve además una vinculación de tipo clientelar con la población de menores recursos con base en los pocos bienes y servicios que la municipalidad produce, y en gran medida, a través del empleo municipal mismo. Los recursos municipales, por lo general, no solamente no son suficientes, sino que suelen estar atados a ciertos servicios, ya que mayoritariamente se componen por tasas que retribuyen su prestación. Ello genera grandes dificultades para establecer políticas sociales y para financiar servicios indivisibles. En la actual situación y por efecto de las políticas de ajuste, la producción pública de los componentes de la gestión local tiende a limitarse y a desaparecer, en particular, la atención de la población de menores recursos. Asimismo, la condición metropolitana dificulta el papel de las municipalidades metropolitanas, dado que la distribución territorial de las necesidades y de los recursos tiende a estar configurada en patrones de segregación que afectan tanto a las necesidades y recursos de la población como de los aparatos municipales.

Es importante señalar que la mencionada debilidad institucional; debe ser modificada para luego llegar a promover procesos de desarrollo social que atiendan las diferentes necesidades de la comunidad, siendo importante analizar, también, como dice (Blaikie et al, 1998) las causas de fondo, presiones dinámicas y condiciones inseguras, para de esta manera disminuir los riesgos y los niveles de vulnerabilidad, es en verdad una característica que puede extenderse no sólo a los gobiernos locales, sino también al conjunto del estado y a las organizaciones e instituciones sociales que se plantean como nuevos actores de las iniciativas como ser: ONGs, instituciones escolares, organizaciones parroquiales, entre otras. Esto sucede porque de lo que en verdad se trata, es de un cambio de paradigma, que abarca una nueva concepción de las relaciones sociales e institucionales, de planificar y gestionar políticas y proyectos, de pensar el territorio. Una nueva forma, de construcción política y social, tendiente al trabajo en red, la coordinación y articulación de actores, la cooperación, vertical, horizontal y público-privada, la participación y la cogestión de proyectos y políticas. En síntesis en este marco donde se requieren nuevas capacidades y estilos de gobierno, dos cuestiones se plantean como relevantes: la incorporación de los actores de la sociedad a las tareas de gobierno, y el desarrollo, en el plano institucional, de un gobierno multinivel que articule las aperturas hacia lo local y lo global; la gobernanza supone, entonces, un fenómeno más amplio que los referidos estrictamente a la estructura clásica de gobierno, apuntando así a actividades que son sostenidas por finalidades compartidas. El actor estatal soporta así un desplazamiento de su rol marcadamente decisional y jerárquico, a un papel de acompañamiento y facilitador de las interacciones desarrolladas por los sujetos.

Por último queremos señalar que a pesar de las limitaciones que presentan los municipios pequeños, consideramos que existe una conciencia y esfuerzos crecientes en muchos de estos gobiernos locales, organizaciones sociales y escolares para incorporar otra visión acerca de su territorio, el entorno que los rodea, los riesgos que corren, lo vulnerable que son, la revalorización de su propia identidad, el cuidado y aprovechamiento de sus recursos internos y externos, la participación y consulta ciudadana. En suma, la necesidad de cambiar de una actitud pasiva, la subsidariedad y verticalismo del gobierno nacional por una actitud y gestión activa, que plantea la reconstrucción de los lazos sociales y la legitimidad política, en post de la búsqueda de soluciones viables a las necesidades ante la crisis.

CONSIDERACIONES FINALES

De lo expuesto hasta el momento podemos finalizar expresando, que al hablar de Vulnerabilidad la entendemos como uno más de los componentes del riesgo, de carácter eminentemente social, para cuyo análisis es fundamental atender a la heterogeneidad de las sociedades implicadas, en los desastres, puesto que estas serán las que condicionarán de algún modo las consecuencias catastróficas de la peligrosidad, los diferentes niveles de vulnerabilidad, el grado de exposición y la incertidumbre institucional, política y social de la comunidad.

Esta construcción social, de múltiples dimensiones para su análisis y comprensión, fue la que nos otorgo la posibilidad de abordar desde su enfoque educativo y político institucional, el estudio de la comunidad ribereña de Puerto Vilelas, municipio que integra el Área Metropolitana del Gran Resistencia, en relación a la problemática ambiental de las inundaciones.

La teoría social del riesgo y la ciencia posnormal desde sus diferentes paradigmas teóricos y metodológicos, fueron el marco para indagar acerca de este problema complejo, visto desde estas dos perspectivas particulares y realmente significativas.

Particularmente, nos hubiese poder explayarnos un poco más acerca de cada uno de los aspectos plateados en el objetivo central del trabajo sobre todo en lo que hace a la gestión propiamente dicha aplicada en todos los niveles y los diversos grados de vulnerabilidad de los pobladores en general, pero debido a cuestiones de forma inherentes a la presentación y extensión del informe y los inconvenientes que tuvimos que sortear en las entrevistas realizadas, entre otras pueden contarse, (el conflicto docente, los asuetos, feriados, poca o ninguna predisposición de algunas autoridades escolares, la crisis municipal que tornaba peligroso el ingreso al recinto del municipio), entre otros, condicionaron de algún modo el desarrollo y aporte del mismo; ajustándose finalmente a un planteo teórico – conceptual de estas temáticas principalmente orientado a la reflexión por parte de todos los actores locales.

A continuación algunos aspectos que consideramos importante remarcar y que intentan ser solo un humilde aporte para esta comunidad, en primer lugar acerca de la Vulnerabilidad Educativa:

  • Que los programas estatales y la legislación sobre los temas ambientales, no se transformen en letra muerta, y que sean bajados a las instituciones escolares, dónde se trabajen con estos de forma coordinada entre los actores institucionales y los gubernamentales, con un solo objetivo principal, crear ciudadanos responsables, informados, formados y abiertos a la participación en temas locales de su interés.

  • Que desde los entes oficiales responsables de estos temas implementen dichos programas, los divulguen, los transformen en estrategias de acción, no solo en localidades de la provincia con riesgo hídrico y altamente vulnerable, como nuestro estudio de caso, sino en todo el territorio provincial, sin esperar a la contingencia para actuar y preocuparse de hacerlo y como ( para pensar: ¿Qué porcentaje de la población del AMGR conoce dónde se encuentran las oficinas de Defensa Civil y la Administración Provincial del Agua y que tareas realizan?

  • Que estos proyectos no sean solo una mera formalidad burocrática adaptada a los requerimientos estatales conforme a condicionamientos impuestos por organismos de de préstamo mundial que financian a la provincia.

  • Que en las escuelas de toda la provincia y el país se incluyan los problemas ambientales y de gestión ambiental en los PEI (proyectos educativos institucionales), haciendo hincapié en estrategias didácticas que trabajen sobre problemáticas locales, sin excluir las globales y regionales, pero concientizados a partir de las experiencias cotidianas, solo así se logrará reducir la incertidumbre y se mitigará y reducirá la vulnerabilidad.

  • Que las instituciones escolares se constituyan en un motor que a partir del trabajo diario con los alumnos, demás actores institucionales y los padres, logren movilizar a la comunidad, a la participación, la gestión, la cooperación, haciendo del conocimiento un instrumento de real significancia prevenir los efectos de futuros episodios.

  • Aprovechar la implementación de una nueva Ley de Educación Nacional y lineamientos curriculares, incluir estos temas, como los de gestión y gobernabilidad como parte de la formación del alumno como ciudadano responsable. Y motivar así a que la escuela se transforme en el entorno ideal para que niños y adolescentes se formen e interactuen dentro de ella y hacia fuera (comunidad).

Solo así las nuevas generaciones podrán desde su formación y educación formal y no formal participar, cooperar, involucrarse y llevar adelante conjuntamente con el estado, políticas de reducción de riesgos y vulnerabilidad.

A nivel político e institucional:

  • Se hace ante esta crisis por la que hoy transita la comuna, más exactamente su municipio, un cambio de rol del estado a partir de un nuevo paradigma de la gobernabilidad, creemos que este cambio de gobierno a partir de diciembre, es una buena oportunidad para llevar adelante acciones de reconversión institucional que apunten a promover acciones dónde el municipio y sus representantes legítimamente electos se transformen en promotores y orientadores de las actividades participativas y en coordinación con la comunidad en su conjunto.

  • Que enfrenten sus propias incertidumbres por medio del conocimiento, la información, la comunicación, la interacción con los demás actores sociales y fundamentalmente de la co-gestión.

  • Que encaren la gobernabilidad, como gebernanza es decir dónde ellos sean un actor más y no se cierren en posturas limitantes, ocasionales, provechosas y promuevan una actitud positiva de interacción multinivel entre las organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, y se abran a la comunidad con la mejor disposición.

  • Que asuman su rol de hacer de nexo entre esos diversos niveles de actuación, creando ámbitos de consenso, promoción y conciliación.

  • Que dejen de lado sus “principios” partidistas y su visión clientelar de la sociedad ante la emergencia.

  • Que tomen conciencia de que continúan construyendo riesgo en zonas altamente vulnerables y prohibidas con el aval de organismos gubernamentales con concepciones política e institucionales del pasado quiénes están más interesados en ganar votos, mediante las obras que se inauguran, que de analizar seriamente las limitaciones con que cuentan y adoptar estrategias menos riesgosas, y más sustentables para la población, ya vulnerable por otras condiciones a las que se suman las construídas por el mismo estado, que promulga un doble discurso, sin mediar las consecuencias de sus propias acciones.

  • Que propicien ámbitos de diálogo con la comunidad y no de negación frente a sus inquietudes y otras propuestas viables, que por supuesto esta de más decir que no siempre le son favorables a sus propios intereses.

  • Que intenten dejar de lado la crisis institucional, generada por sus propias contradicciones y conductas irregulares, y se ocupen de los temas relevantes del municipio, como la expansión urbana, el crecimiento demográfico, la ocupación cada vez mayor de áreas vulnerables, que instruyan a la población, que le comuniquen los riesgos que los acechan y que deben enfrentar conjuntamente, dejando de lado el asistencialismo y clientelismo de turno que solo los conforma y promueve en ellos conductas negativas no propicias para el desarrollo óptimo de su comunidad.

  • Que comiencen por actuar y sentirse parte de su comunidad, porque a pesar del “poder” que hoy poseen en caso de desastres ellos también son afectados por los mismos, sin saber como enfrentarlo muchas veces, esperando soluciones externas a sus demandas.

Finalmente y a modo de cierre quisiera como docente destacar y rescatar la labor de algunos de mis colegas quiénes contra viento y marea llevan adelante su tarea, desarrollando esto temas ambientales, educando y concientizando a los alumnos sobre que actitudes adoptar, partiendo del conocimiento de los mismos y disminuyendo así sus propias incertidumbres y motivándolos cada día en sus valores humanos y sociales.

Al gobierno local, que en la actualidad se impone un cambio de visión de paradigma de la gobernabilidad, de cambio de rol, en dónde lo que se pretende hacer es que sus actores sean parte activa de la comunidad y no le den la espalda en pos de sus propios intereses.

 
 

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