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LA CALIDAD DE VIDA URBANA. UNA PROPUESTA PARA SU EVALUACIÓN URBAN LIFE QUALITY. A proposal for its evaluation |
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INTRODUCCIONLa ciudad como proyecto de una sociedad debe responder a un conjunto de necesidades sociales y económicas de la población, a la disponibilidad y generación de un conjunto de satisfacciones para esas necesidades, de manera tal que se garantice una calidad de vida aceptable. Dos premisas sustentan el significado y el efecto de este estudio: el desarrollo, en su dimensión social, económica y cultural, es a la vez el proceso por el cual se mejora la calidad de vida humana, y el proceso de desarrollo implica el manejo de los componentes del medio ambiente, tanto natural como antrópico El objetivo fundamental del trabajo consiste en proponer un modelo para evaluar la calidad de vida en áreas con riesgos naturales de la Ciudad de Resistencia. A partir del objetivo, se organizó el trabajo en dos etapas: una de gabinete y otra con salidas a campo. La primera de ellas nos permitió recopilar información bibliográfica sobre la temática: calidad de vida, con el fin de definir la postura sobre la misma, identificando los indicadores que utilizaríamos, y a partir de ellos seleccionar los más convenientes para construir el modelo de análisis. La segunda tuvo como fin poner a prueba el modelo propuesto . Definido el modelo, se aplicó el mismo en dos espacios territoriales (trabajo de campo en un Barrio y en una Villa), con el objeto de la consecución de los objetivos planteados, y a la vez detectar las falencias y los ajustes que fueran necesarios realizar en el mismo. Cumplida la etapa anterior, se trabajo nuevamente en el gabinete para evaluar el modelo y presentar el definitivo, dando de esta manera cumplimiento a las tareas previstas. 1.- CONCEPTUALIZACION DE CALIDAD DE VIDA. Calidad de vida, es un concepto muy subjetivo, propio de cada cultura, asociado a otros como: bienestar, condiciones de vida, nivel de vida, felicidad y estilo de vida. Existe un acuerdo universal relacionado con la idea que promoviendo el bienestar del hombre nos acercamos a una de las metas legítimas de un Estado moderno (ANDREW, 1974)[1]. A pesar de ello, las sociedades occidentales, desarrolladas y no desarrolladas han dado mayor importancia al desarrollo económico y al crecimiento económico, que al bienestar social de la población, de allí que los estudios sobre las condiciones de vida surgen como contrapartida a esta tendencia. El término calidad de vida comienza a utilizarse entrados los años sesenta, pero principalmente a partir de la década del setenta como una reacción a esos criterios economistas y de cantidad que regían en los llamados “informes sociales” o “contabilidad social”, pues durante mucho tiempo los Organismos Internacionales se cuestionaron en sus estudios sobre el desarrollo, cuanto produce tal o cual nación. En los últimos años la pregunta cambió de dirección y esos mismos Organismos se plantean ahora: como se encuentran los habitantes de la Nación, aludiendo con ella al concepto de calidad de vida. De esa manera el centro del desarrollo debe forjarse alrededor de las personas y no éstas alrededor del desarrollo. Un enfoque distinto ofreció la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), -Organización Intergubernamental-, con sede en París, que reúne a veinticuatro de las naciones más industrializadas del mundo, con fines de intercambio comercial mundial, tanto entre las naciones miembros como así también con los países menos desarrollados - estableció en 1970, por primera vez, la necesidad de insistir en que el crecimiento económico no es una finalidad en sí mismo, sino un instrumento para crear mejores condiciones de vida. Antes de continuar es necesario esclarecer algunos conceptos:
A pesar de la variedad de términos, en la conceptualización de calidad de vida queda explícito o implícito que un individuo o un grupo tiene un conjunto de necesidades básicas y de aspiraciones que de alguna manera y grado, debe satisfacer, de acuerdo con la accesibilidad y disponibilidad de recursos, en el marco de valores y normas de una sociedad. Los autores que han trabajado con el término - calidad de vida -, concuerdan en que no existe una teoría única que defina y que explique el fenómeno, pero está en conexión con el “universo ideológico y no tiene sentido si no es en relación con un sistema de valores”, en expresiones de SALVADOR RUEDA (1998). LEVI Y ANDERSON (1980)[2] sostienen que “...por encima de un nivel de vida mínimo, el determinante de la calidad de vida individual es el “ajuste” o la “coincidencia” entre las características de la situación y las expectativas, capacidades y necesidades del individuo, tal y como él mismo las percibe”. Conceptualizar al término, ha originado contrapartida en las investigaciones, dado las orientaciones utilizadas y las denominaciones asignadas. Algunos autores la asocian al bienestar social (SMITH, 1980), otros al estado de felicidad del hombre (DREWNOSKI, 1974) [3], o lo relacionan con la satisfacción de necesidades (MASLOW, 1954), o con los estados de salud y satisfacción de cada individuo. En cuanto al concepto de “calidad del medio ambiente urbano”, espacio donde nos desempeñamos diariamente, la Prof. MARÍA TERESA DELGADO DE BRAVO (1996), de la Universidad de Los Andes, Venezuela, sostiene que es: “El grado de bienestar individual y en grupo, determinado por la satisfacción de necesidades fundamentales de la población urbana, con los recursos disponibles o generados en el ambiente natural, transformado y social de la ciudad”. [4] De lo expresado anteriormente se deduce que la mejor conceptualización de la “calidad de vida “ es la calidad de la vivencia que de la vida tienen los sujetos. Su estudio significa analizar las experiencias subjetivas de los individuos que la integran, implica conocer como viven los sujetos, sus condiciones objetivas de existencia y qué expectativas de transformación de éstas condiciones desean y evaluar el grado de satisfacción que se consigue. Esas experiencias, en principio relacionadas con las necesidades del individuo, cada vez más van tomando un matiz social y comunitario, llegando a la conclusión que la máxima expresión de la calidad se da en una situación de equilibrio ecológico perfecto, tanto en lo biótico, y de entorno, como en lo social y cultural. Por lo tanto estamos ante una situación de bienestar, que indudablemente nos acerca a la definición de salud que la Organización Mundial de la Salud propuso, como “no sólo ausencia de enfermedad o padecimiento, sino también el estado de bienestar físico, mental y social”. En términos generales, aunque existen controversias entre los investigaciones sobre la temática, el alcance y contenido del concepto de calidad de vida, todos lo asocian a la satisfacción de algún tipo de necesidades de la población. 2.- OPERACIONALIZACION DEL CONCEPTO CALIDAD DE VIDA. Se entiende por operacionalización la búsqueda de indicadores concretos, empíricos, capaces de traducir y permitir encontrar en la práctica, los conceptos teóricos y las variables involucradas en un problema de investigación. La búsqueda de indicadores de calidad de vida es facilitada por contener a los indicadores de "nivel de vida", elaborados por las ciencias interesadas en el proceso de explicación de las causas del atraso de las sociedades subdesarrolladas. Los indicadores deben cumplir con las siguientes pautas:
Estos indicadores nos conducirán a caracterizar a los habitantes de un espacio geográfico, pero al mismo tiempo a detectar su diferenciación. Según TILLY la diferenciación es cualquier cosa que conduce a discernir entre personas o el contacto entre seres desiguales. Retomando el concepto vertido de operacionalización sobre calidad de vida se parte de la definición teórica, se reconocen las dimensiones o componentes de necesidad involucrados en el concepto, que conduce a una definición operativa. Cada componente está formado a su vez por varios aspectos, los cuales se expresan en términos de “satisfactores” o “no satisfactores” de las necesidades implícitas en el mismo y por último, se formulan las variables e indicadores que van a permitir medir cada uno de esos aspectos. La selección de variables e indicadores de calidad de vida y las medidas usadas para determinar las desigualdades existentes, resultan notablemente influidas por el ámbito espacial utilizado. Concluyendo, respecto a esta cuestión de la medición de la calidad de vida, señalaremos algunas problemáticas sobre la base de lo expuesto que debe considerarse:
La calidad de vida del ser humano no depende exclusivamente de su bienestar material o de la satisfacción de sus necesidades básicas, sino también de crecientes e inagotables reivindicaciones, como la justicia, la libertad, el ejercicio real de un pluralismo político y social, la participación activa en la toma de decisiones, lo que implica un efectivo acceso al poder y la circulación del mismo; el desarrollo de la propia identidad cultural y el despliegue de las potencialidades creativas de individuos y sociedades.
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| [1] | Citado por Diaz, K. Los Estudios Geográficos sobre la calidad de vida en Venezuela. Pág. 55. |
| [2] | Díaz, K. Ob.Cit.. Pp. 57. |
| [3] | Citado por Díaz, K. Ob. Cit.pág. 102. |
| [4] | Delgado de Bravo, M.T. Ciudades medias, planificación urbana y calidad de vida. Pág. |
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Instituto de Geografía (IGUNNE). Facultad de Humanidades. UNNE. Resistencia, Chaco. Argentina |