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El 27 de abril próximo pasado se ha producido el deceso del Dr. Ingeniero Eliseo Popolizio, Director y fundador del Centro de Geociencias Aplicadas, docente de las cátedras Geomorfología I y Geomorfología II del Profesorado y Licenciatura en Geografía de esta Facultad. Docente e investigador de larga trayectoria, cuya encomiable labor tuvo reconocimiento local, nacional e internacional. El Doctor
Ingeniero Eliseo Popolizio, fue docente de docentes, formador de
formadores, una persona inquieta y laboriosa, siempre dispuesta a
dar más y más por el desarrollo local y regional, por llevar el sa Tan es así que aún con una penosa enfermedad que fue minando su salud, asistió hasta pocos días antes de su muerte a su puesto de trabajo, un ejemplo en tiempos de tanta inconstancia y desinterés. Bien vale para él esta frase de Bertolt Brecht “Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles” O bien desde la Geografía, ciencia que enseño con cariño y amplitud, buscando desarrollar un espíritu observador y crítico en sus discípulos, ciencia en la incursionó como investigador, especialmente en un área difícil y compleja, la Geografía Física y sus diferentes especializaciones, agrupadas hoy como Ciencias de la Tierra, labor que cuido con celo y constancia, tal vez pueda sintetizar este pensamiento en las siguientes expresiones del geógrafo brasileño Aziz Nacib Ab’Saber, quien dice: “Son los geógrafos los que cuidan de las relaciones entre hombres, comunidades, sociedades y el medio ambiente en que esos componentes básicos del planeta, junto con la vida vegetal y animal, tienen su hábitat”. Sin lugar a duda, quienes fuimos sus alumnos y colegas, cada barranca, terraza, cada efecto de la erosión hídrica, cada roca o suelo nos devolverá la imagen de Popo como afectuosamente lo llamábamos, y los medios y el publico en general lo recordará en cada inundación del bravo Paraná con su elocuencia sobre las crecientes excepcionales. Pero tras el profesional, tras el maestro hubo también una persona, un amigo, un personaje con una chispa singular y un humor notable.
PROFESOR, MUCHAS GRACIAS POR SUS ENSEÑANZAS… ¡HASTA SIEMPRE!
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científico y tecnológico más allá de las puertas de los claustros.
